Introducción
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Crónicas 7:14
si se humilla Mi pueblo, sobre el cual Mi Nombre es invocado,
y oran, y buscan Mi rostro, y se convierten de sus malos caminos;
entonces Yo oiré desde los cielos, perdonaré sus pecados y sanaré su tierra.
Los trabajos de esta página responden a una necesidad de dar de gracia lo que de gracia hemos recibido. Como una necesidad sentida en nuestro corazón y puesta por Dios, de compartir prédicas y estudios bíblicos sobre aspectos importantes, que la Iglesia como pueblo de Dios aún no se ha apropiado y que ha impedido un despertar de los creyentes de Cristo, que aún están dormidos, sin tomar la autoridad y la victoria que ya nos ha sido dada. Algunos de los tópicos que trataremos son: El Reino de Dios; El Evangelio del Reino, que es que ha anunció Jesús; La Segunda Venida de Jesús, El Tiempo del Juicio, proclamado por Jesús y Juan en Apocalipsis; El Fundamento de la Iglesia: Apostólico y Profético; La Escatología de Victoria, entre otros temas importantes.
Creemos en un Dios que existe en tres personas,
el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. Otra manera dicho creemos en el Trinidad.
Entonces no tenemos nada que hacer con los testigos de Jehováh que son unitarios
y cree que Dios NO es un Trinidad.
Es necessario explicar esto por que un parte essential de los Pentecostales tienen problemas
con escudriñar la Biblia y nos han llamado "Testigos de Jehováh"
para que usted no escundriña la messaje que hemos presentado con fuerza en el poder de Dios.
Los vocablos Trinidad y personas, según se relacionan con la Deidad, aunque no se encuentran en la Biblia, son vocablos que están en armonía con ella, por lo tanto podemos comunicar a los demás, nuestro entendimiento inmediato de la doctrina de Cristo respecto al Ser de Dios, según se distingue de "muchos dioses y muchos señores". Por tanto podemos hablar debidamente de YáHaWaH, traducido como Kurios en Greco y Señor en Español, que es nuestro Dios, que es un solo Señor, como una Trinidad o como un Ser de tres personas, sin apartarnos por los vocablos de las enseñanzas bíblicas (como ejemplo, Mateo 28:19; 2 Corintios 13:14; Juan 14:16, 17).
De la misma manera, hay atributos en el Padre que lo constituye Padre y no Hijo; hay atributos en el Hijo que lo constituye Hijo y no Padre; y hay atributos en el Espíritu Santo que lo constituye Espíritu Santo y no Padre ni Hijo. Por lo que el Padre es el Engendrador; el Hijo es el Engendrado; y el Espíritu Santo es el que procede del Padre y del Hijo. Así que, por cuanto estas tres personas de la Deidad están en un estado de unidad, existe un solo Señor Dios Todopoderoso y cada persona de la Trinidad tiene un nombre; el cual es Señor (Padre, YáHaWaH), Jesu- (Jesús), Cristo (Espíritu Santo). (Juan 1:18; 15:26; 17:11, 21; Hechos 2:38; 8:16; 19:5; 1 Juan 2:27; Zacarías 14:9.).
Creemos en Cristo Jesús como el único camino para llegar a Dios; Como dice la Biblia (Mateo 1:23; 1 Juan 4:2, 10, 14; Apocalipsis 1:13 y 17, Juan 14:7; Hebreos 1:3; 1 Pedro 3:22; Hechos 2:32-36; Romanos 14:11; 1 Corintios 15:24-28), que quien Le conoce a Él, conoce al Padre. Creemos en su sacrificio en la cruz para darnos vida (Juan 14:7).
Creemos en la Biblia como fuente inspirada por Dios mismo para la guía del creyente en el mundo, usándola constantemente y siendo llenos del Espíritu Santo, podamos encontrar estrategias de victoria para esta vida con perspectiva del Reino (Mt. 3:2, Mt. 6:10-13, Mt. 6:33).
Creemos en el Espíritu Santo de Dios que mora en los creyentes, que creen que su pecado esta perdonado por la obra en la cruz. El Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad y tambien la promesa que Jesús nos dio (Juan 3:5, 8; Hechos 1:8). Y Él está habitando en el Templo de Dios, que es Su Iglesia, que son los creyentes (1 Corintios 3:16). Porque Su morada ha sido movida y traspasada (Isaías 38:12; Apocalipsis 21:2, 9-10; 11:8; Mat. 23:34-24:2; 1 Corintios 3:16-17; Efesios 2:20-22; Romanos 8:9).
Todos los creyentes pueden recibir el bautismo en el Espíritu Santo, y por tanto, deben buscar ardientemente y practicamente aplicar la promesa del Padre, según el mandato de nuestro Señor Jesucristo. Esa fue la experiencia normal de todos los cristianos de la iglesia primitiva. Con esta experiencia viene la provisión de poder para la vida cristiana victoriosa y para un servicio con frutos del Espíritu Santo en abundancia. También provee de dones espirituales específicos para un ministerio más efectivo. El bautismo de los cristianos en el Espíritu Santo está acompañado de la evidencia física inicial de hablar en otras lenguas (lenguas no aprendidas) según el Espíritu les concede expresarse. (Lucas 24:49; Hechos 1:4, 8; 2:4; 8:12-17; 10:44-46; 11:14-16; 15:7-9; 1 Corintios 12:1-31, Efesios 1:13), y esto esperamos como lo más frecuente (Hechos 2:4, 11; 1 Corintios 14:39). Aunque puede ocurrir que el bautizo del Espíritu Santo va junto con otros dones espirituales, como profetizar o palabras de conocimiento, u otros que se describen en 1 Corintios 12:4-12. La Iglesia del Señor-creyentes que adoran a Dios en espíritu y en verdad, es allí donde habita el Señor (Hechos 7:48; 17:24).
Mencionaremos repetidamente sobre la nación de Israel o pueblo judío, lo haremos solo desde un enfoque bíblico. Es importante mencionar que como cristianos condenamos, así como la historia ha condenado los horrores del holocausto a los judíos, así como condenamos cualquier hecho de violencia. Es importante esta aclaración para evitar interpretaciones erróneas sobre nuestra postura frente a lo que la biblia describe del pueblo israelita a la luz del Nuevo Testamento.
Fue claro y contundente Jesús al decir: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis también a mi Padre conocerías (Juan 14:6-24).